lunes, 6 de agosto de 2012

Juegos inocentes.

Si, yo creo que es mejor si jugamos a la suisa, o a los cojíos. A la casita? Los hombres no juegan con muñecas. A los pistoleros, eso. Cómo, a ver quien orina más lejos? A las escupidas. Eso me gusta más.

Entramos por el patio crzando la cerca. Corrimos una puerta de cristal enorme sin necesidad deforzarla. Nos sentamos en unos mullidos sillones tapizados de tela de damazco decorados con flores.

Dicen que aqui vivían unos ricos vende patria. Eramos cuatro, o cinco? Fué Rigo el primero en sacarsela. Aunque era tan jóven como nosotros (o tan niño), al parecer ya conocía el valor de poseer una buena arma. Fuí sólo yo quien al mirarsela quedó encantado? Nos instó a los otros a masturbarnos. Fué él quien más lejos llegó.


Por Luis Ruiz.

No hay comentarios: