jueves, 17 de diciembre de 2009

LA HOMOSEXUALIDAD "DESDE UNA PERSPECTIVA BÍBLICA"




Leo con espanto sobre una película realizada en Cuba por una senora llamada Giselle Galbán, que trata el tema de la homosexualidad "desde una perspectiva bíblica", según el artículo.

"Como al principio" se presentó en un cine de la isla, y es parte de un trabajo que realiza ésta mujer empenada en "restaurar la masculinidad" del homosexual que quiera dejar de serlo.

Un dato importante, y que sin duda justifica que a esta altura de los tiempos, en el ano 2009, alguien pueda asumir tales teorías, es que la Galbán es junto a su esposo Pastora de una iglesia Metodista en Morón, provincia de Ciego de Avila. Lo digo pporque ya conocemos los desmanes de la iglesia. Me pregunto si éste trabajo no será una venganza contra su propio marido, al que tal vez ha sorprendido en "actitudes impropias" con algunos jovencitos detrás del altar.

"Sacar a los homosexuales de su confusión", "adicción al sexo" y la "masturbación". Esta mujer es una fustrada, y mucho más: una perversa.

Hasta hay el testimonio de un hombre que ha vivido la restauración de su masculinidad luego de entregar su vida a Jesús.

Me gustaría conocerlo, no al film, sino al invertido (quiero decir: al "convertido"). Se tratará de una Secta? No lo dudo.

No hay éxtasis que supere el placer del sexo. Ya lo he dicho, hasta si se hace con una cucaracha. Yo he experimentado estra sublime "iluminación" con hombres y mujeres, y cada día despierto con el ánimo de entregarme a las mismas experiencias. Comparto mi cama con un hombre (con el que estoy casado legalmente; vivo en un país civilizado y libre) y esa ha sido la decisión más inteligente de mi vida (después de la más grande: abandonar la isla). Ah, y sin renunciar al otro placer: la "masturbación", que también es un acto magnífico, puro, sublime, cuya práctica inicié desde muy jóven en companía de otros amiguitos.

No es raro que en la isla sucedan estas cosas, tan confundida y obstinada como anda su gente. Y precisamente allí, donde si no te pones a tiro hasta las piedras te violan. Y sé de lo que hablo.

Por Luis Ruiz

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