miércoles, 22 de diciembre de 2010

Pensamiento.

Me voy rompiéndo en partíxculas
tan finas, casi microscópicas,
que el aire ha impulsado
los restos hasta no dejar
huellas visibles.
Por Luis Ruiz.

domingo, 19 de diciembre de 2010

Insomnio.

Tres de la madrugada. No puedo precillarme los ojos e invocar el ángel del sueño. Afuera la noche nevada es una sinfonía silenciosa, apta para espíritus que no son de éste mundo. Así la veo desde la ventana de la biblioteca, desde mis ojos cansados y trasnochados.
Al azar, como aquel juego de cuando nos reuníamos a leer fragmentos de un libro abierto en cualquier página, a modo de respuesta a lo que el anterior había leído, estableciendo así un diálogo que en su aparente incoherencia resultaba fabuloso. Desde entonces no pierdo la costumbre, y lo utilizo a menudo para buscar respuestas a preguntas que me hago a mí mismo.

De Sodoma y Gomorra, de Marcel Proust:

Y hasta llegó a ocurrir la cosa en una misma comida, donde continuaba con el otro la conversación comenzada con el primero. A la larga, por asociación de ideas, llegó a odiar de tal modo los tomates, incluso los comestibles, que cada vez que oía a un viajero pedirlos junto a él en el Gran Hotel, le decía por lo bajo: "Perdone, caballero, que me dirija a usted sin conocerle, pero he oído que pedía tomates. Hoy están podridos. Se lo digo por su bien, pués a mí me es igual, yo no los tomo nunca".


Por Luis Ruiz.

Cuarto y último Adventssonntag.

Que frío...de p... queridos amiguitos. Y como cada Adventssonntag fuímos al Mercado a tomar Glüwein, bautizado naturalmente (mit Schuß), o sea, con Amaretto o Ron, nosotros lo tomamos con ron, y requete bautizado, que el señor nos conoce y es bastante dadivoso. Así se cumple un ciclo, de qué? No lo sé, da lo mismo, se acabaron los Adventssonntag, pero no los Glüwein, ni los rones, ni las celebraciones, esas quedan a cuenta de nosotros: que no es lo mismo pero es igual...como dice una canción. La foto nos la hizo unas amistades que nos encontramos allí y con las que compartimos la noche y el frío. Y según los pronósticos seguirá nevando: Eso es lo que nos toca. Por la libreta o por el horóscopo...


Por Luis Ruiz.

Estos son mis vecinos encantadores...

Esas manchas oscuras sobre la nieve blanca son mis encantadores vecinos. Una familia de conejos que habita en el patio de nuestro edificio. Ellos, desde luego, ignoran que los observo cada día desde las ventanas de nuestro apartamento. Hasta de madrugada los vigilo.
Han construído sus casas debajo de la tierra, es curioso verlos salir de sus guaridas en medio de la blancura de la nieve, que por estos días no cesa de caer. Y allí en esa posición permanecen inmóviles largo rato, indiferentes al frío. Ayer los sorprendí con estas fotos.
Por Luis Ruiz.