Y según la tradición, mañana se enciende la primer vela. Este Adventskranz, que es como se le llama, y del cual existen miles de modelos, se coloca en el centro de la mesa de centro de la sala. Los anfitriones e invitados se sientan alrrededor a tomar café y comer dulces (Plätzchen), que es como se llaman, una especie de galleticas que la mayoría de las veces se hornean en casa, según el talento culinario de los anfitriones desde luego. Luego el resto de los siguientes domingos se van encendiendo las demás velas hasta llegar al cuarto y último Advent.
Desde luego yo no conocía esta tradición, y para ser sinceros no me interesan demasiado, no soy de ritos y tradiciones, sin embargo, como cae dentro de las celebraciones navideñas, yo preparo mi propio Adventskranz, porque además soy un fanático de las velas, sobre todo en invierno.
Desconozco como celebran estas fechas en los demás países, y si mis lectores siguen este tipo de tradición, pero a todos deseo un felíz domingo, y Einen schönen Advent!
Por Luis Ruiz.
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