Juntemos nuestros labios, nuestros cuerpos, el alma. Olvidemonos del mundo. A quien le importa a que dedicamos nuestras horas? Es preciso mantenerse así, unidos, fundidos, y que nadie sepa quien es quien.
Por Luis Ruiz.

martes, 12 de junio de 2012
lunes, 11 de junio de 2012
domingo, 10 de junio de 2012
Xiomara Laugart regresó a La Habana y actuó junto a Argelia Fragoso en una Paladar del Barrio Chino.
(Gracias a Jorge)
Por Ivón Peñalver
Crónica de un regreso: Xiomara Laugart
6/JUN/2012
Decía Gardel que veinte años no eran nada, y respetando su parecer, para muchos cubanos resultó una eternidad el tiempo que distó desde la última vez que vimos en el Teatro Nacional a la otrora morena delgada de largas trenzas que, como nadie, cantó Paria y recordó a una Habana de leyenda.
Xiomara Laugart regresó a La Habana sin fiesta de quince, aun cuando fueron quince los años transcurridos sin oír su risa contagiosa, ni reconocer aquellos brillantes ojos que, sin ser verdes, eran inconfundibles.
Regresó y la acogió la Ciudad de las Columnas como si no se hubiese marchado, la urbe que en los ochenta la vio ganar un concurso Adolfo Guzmán; la vio triunfar en aquellos festivales en los cuales La Habana era motivo de inspiración, y la vio alejarse bohemia junto a almas gemelas como las de Tosca, José Antonio Quesada, Santiago Feliú, Amaury Pérez…entre otros.
Su regreso fue inesperado a la vez que impetuoso y tierno; sabio y aventurero; mágico y raigal. Y ahora más vale saber qué habrá después de esta inusitada fiesta de quince que allende los mares no pudo prepararse, pero que La Habana le tenía reservada aun cuando no sabía cuando alcanzaría la mayoría de edad.
El azar quiso por demás que se encontrase con los de siempre; con los de nunca y con los que quizás se queden en su vida. Esta vez, desde la Casa de las Américas alzó su voz tomada por la noche, la madrugada y su insistente gripe, pero no calló. Sus agudos y graves se habían quedado en la memoria, por tanto, no necesitó decir mucho. Su presencia lo dijo todo… Estoy aquí por ustedes…
Y el recuerdo llegó hasta un público mayor que la esperaría en el Centro Cultural Sauce, aunque la caprichosa lluvia no permitió el encuentro. Entonces quedaba para ella aún por saldar una deuda, y era reencontrarse en el Café Jade con la valiosa cantante cubana Argelia Fragoso. Así en el centro del Barrio Chino, exactamente en el Café Jade, donde la Fragoso es anfitriona de la noche sabatina, se unieron por primera vez en un escenario nacional Xiomara y Argelia, y se hizo la música, las emociones, la complicidad de dos intérpretes que han tenido la virtud de transitar con acierto por diferentes géneros cubanos y foráneos. No sé decir que pasó pero la noche se tornó mágica, tal vez recordando algún motivo que hiciera que César Portillo de la Luz, la describiera como negra bonita de ojos de estrella.
Esta vez, del escenario a la mesa en la que le acompañaban— aún sorprendidos— sus padres, Xiomara se llenó de la Cuba que no dejó atrás. Igualmente, de anfitriona a compañera, Argelia junto al maestro Emilio Morales y sus Nuevos Amigos, prestigió con su repertorio a la Cuba que siempre lleva consigo.
Y amigos todos, cubanos, todos, fuimos los que el sábado 2 de junio, a las 9 de la noche, dimos nuevamente la bienvenida a la Negra, a la Xiomara de los cubanos, a la que ya aclamamos por un pronto regreso de una semana, un mes, un año o diez… o una vida. Un tiempo que no permita que se celebren otros quince años sin que bailemos en su fiesta los que hoy la recibimos.
Y así, intranquila, impetuosa, pasional y auténtica quedó todo preparado para un próximo encuentro en el esperado Centro Cultural Sauce, donde como de costumbre estará formando parte de esa Habana suya, NUESTRA.
Por Luis Ruiz.
Por Ivón Peñalver
Crónica de un regreso: Xiomara Laugart
6/JUN/2012
Decía Gardel que veinte años no eran nada, y respetando su parecer, para muchos cubanos resultó una eternidad el tiempo que distó desde la última vez que vimos en el Teatro Nacional a la otrora morena delgada de largas trenzas que, como nadie, cantó Paria y recordó a una Habana de leyenda.
Xiomara Laugart regresó a La Habana sin fiesta de quince, aun cuando fueron quince los años transcurridos sin oír su risa contagiosa, ni reconocer aquellos brillantes ojos que, sin ser verdes, eran inconfundibles.
Regresó y la acogió la Ciudad de las Columnas como si no se hubiese marchado, la urbe que en los ochenta la vio ganar un concurso Adolfo Guzmán; la vio triunfar en aquellos festivales en los cuales La Habana era motivo de inspiración, y la vio alejarse bohemia junto a almas gemelas como las de Tosca, José Antonio Quesada, Santiago Feliú, Amaury Pérez…entre otros.
Su regreso fue inesperado a la vez que impetuoso y tierno; sabio y aventurero; mágico y raigal. Y ahora más vale saber qué habrá después de esta inusitada fiesta de quince que allende los mares no pudo prepararse, pero que La Habana le tenía reservada aun cuando no sabía cuando alcanzaría la mayoría de edad.
El azar quiso por demás que se encontrase con los de siempre; con los de nunca y con los que quizás se queden en su vida. Esta vez, desde la Casa de las Américas alzó su voz tomada por la noche, la madrugada y su insistente gripe, pero no calló. Sus agudos y graves se habían quedado en la memoria, por tanto, no necesitó decir mucho. Su presencia lo dijo todo… Estoy aquí por ustedes…
Y el recuerdo llegó hasta un público mayor que la esperaría en el Centro Cultural Sauce, aunque la caprichosa lluvia no permitió el encuentro. Entonces quedaba para ella aún por saldar una deuda, y era reencontrarse en el Café Jade con la valiosa cantante cubana Argelia Fragoso. Así en el centro del Barrio Chino, exactamente en el Café Jade, donde la Fragoso es anfitriona de la noche sabatina, se unieron por primera vez en un escenario nacional Xiomara y Argelia, y se hizo la música, las emociones, la complicidad de dos intérpretes que han tenido la virtud de transitar con acierto por diferentes géneros cubanos y foráneos. No sé decir que pasó pero la noche se tornó mágica, tal vez recordando algún motivo que hiciera que César Portillo de la Luz, la describiera como negra bonita de ojos de estrella.
Esta vez, del escenario a la mesa en la que le acompañaban— aún sorprendidos— sus padres, Xiomara se llenó de la Cuba que no dejó atrás. Igualmente, de anfitriona a compañera, Argelia junto al maestro Emilio Morales y sus Nuevos Amigos, prestigió con su repertorio a la Cuba que siempre lleva consigo.
Y amigos todos, cubanos, todos, fuimos los que el sábado 2 de junio, a las 9 de la noche, dimos nuevamente la bienvenida a la Negra, a la Xiomara de los cubanos, a la que ya aclamamos por un pronto regreso de una semana, un mes, un año o diez… o una vida. Un tiempo que no permita que se celebren otros quince años sin que bailemos en su fiesta los que hoy la recibimos.
Y así, intranquila, impetuosa, pasional y auténtica quedó todo preparado para un próximo encuentro en el esperado Centro Cultural Sauce, donde como de costumbre estará formando parte de esa Habana suya, NUESTRA.
Por Luis Ruiz.
sábado, 9 de junio de 2012
Beth Ditto, "I Wrote The Book"
He tenido la suerte de disfrutarla en directo, y les aseguro que es una experiencia inolvidable.
Por Luis Ruiz.
Por Luis Ruiz.
jueves, 7 de junio de 2012
VELORIO DANIEL SANTOS BAILARIN CUBANO TEATRO MUNICIPAL 30 MAYO
Abro el correo y me encuentro éste video que me manda mi amiga Magda. Desde siempre Daniel fué diabético, debía inyectarse cada día. Durante las clases de ballet y los ensayos tenía siempre a su lado una botella de agua con azúcar. A mi gran amigo un pensamiento de amor y amistad eternas.
Por Luis Ruiz.
Por Luis Ruiz.
Lisboa, el encanto cotidiano.
Aqui en elmundo.es y pinchando sobre la imágen que aparece en el artículo, se puede hacer un recorrido maravilloso por Lisboa. Lisboa es una de nuestras ciudades preferidas, todos esos rincones los hemos recorrido siempre con el mismo entusiasmo cada vez que estamos allí, y siempre con la misma fascinación. Es un regalo este viaje virtual. No se lo pierdan.
Por Luis Ruiz.
Por Luis Ruiz.
Un cura negro.
(Gracias a Jorge)
Un cura negro
El padre Armando Miguel Arencibia fue el primer sacerdote negro con que contó la Iglesia Católica cubana. Nació en 1899 en la barriada habanera de Párraga, actual municipio de Arroyo Naranjo, la misma localidad de donde terminaría siendo vicario parroquial. Fue gracias a su esfuerzo y constancia que se pudo construir allí la iglesia de Santa Bárbara.
Los padres de Arencibia, oriundos de Güira de Melena, querían que el hijo siguiese el oficio paterno de tabaquero en el chinchalito familiar. Carecían de dinero para costearle los largos estudios para sacerdote y pensaban que no se vería bien un negro «metido» a cura. Pero monseñor Estrada, arzobispo de La Habana, era de otra opinión y abrió brecha a la vocación del muchacho. En 1920 Arencibia comenzaba a prepararse como sacerdote en el seminario de la isla canaria de La Palma.
No las tendría todas consigo, sin embargo. De allí quisieron enviarlo a Fernando Poo con vistas a hacerlo misionero en África. Se negó el seminarista y tras dos años en La Palma lo trasladaron a Burgos, una de las zonas más frías de España, quizá con la intención de hacerlo desistir de su propósito. No resistió Arencibia el cambio y consiguió que lo enviaran a Roma; estudiaría Filosofía en París y Teología en Italia, y tras diez años concluyó sus estudios.
De nuevo en su tierra, monseñor Ruiz, entonces Arzobispo de La Habana, le dio aspirina y mucho líquido: no quería a un negro en su Iglesia y durante 11 años Arencibia sufrió en silencio las negativas más o menos disimuladas para su ordenación. Todo cambió cuando a la muerte de Ruiz, la mitra arzobispal pasó a monseñor Manuel Arteaga Betancourt.
El 25 de octubre de 1942 Arencibia recibía el sacramento de la Orden Sacerdotal, el primero que impartía el nuevo Arzobispo y días después, el 1ro. de noviembre, decía su primera misa en la Catedral de La Habana.
A partir de ahí construiría una capilla en Párraga, que pondría bajo la advocación de Santa Bárbara, y, ya en los años 50 estaría lista la iglesia, que se inauguraría con la presencia del dictador Fulgencio Batista.
Por Luis Ruiz.
Un cura negro
El padre Armando Miguel Arencibia fue el primer sacerdote negro con que contó la Iglesia Católica cubana. Nació en 1899 en la barriada habanera de Párraga, actual municipio de Arroyo Naranjo, la misma localidad de donde terminaría siendo vicario parroquial. Fue gracias a su esfuerzo y constancia que se pudo construir allí la iglesia de Santa Bárbara.
Los padres de Arencibia, oriundos de Güira de Melena, querían que el hijo siguiese el oficio paterno de tabaquero en el chinchalito familiar. Carecían de dinero para costearle los largos estudios para sacerdote y pensaban que no se vería bien un negro «metido» a cura. Pero monseñor Estrada, arzobispo de La Habana, era de otra opinión y abrió brecha a la vocación del muchacho. En 1920 Arencibia comenzaba a prepararse como sacerdote en el seminario de la isla canaria de La Palma.
No las tendría todas consigo, sin embargo. De allí quisieron enviarlo a Fernando Poo con vistas a hacerlo misionero en África. Se negó el seminarista y tras dos años en La Palma lo trasladaron a Burgos, una de las zonas más frías de España, quizá con la intención de hacerlo desistir de su propósito. No resistió Arencibia el cambio y consiguió que lo enviaran a Roma; estudiaría Filosofía en París y Teología en Italia, y tras diez años concluyó sus estudios.
De nuevo en su tierra, monseñor Ruiz, entonces Arzobispo de La Habana, le dio aspirina y mucho líquido: no quería a un negro en su Iglesia y durante 11 años Arencibia sufrió en silencio las negativas más o menos disimuladas para su ordenación. Todo cambió cuando a la muerte de Ruiz, la mitra arzobispal pasó a monseñor Manuel Arteaga Betancourt.
El 25 de octubre de 1942 Arencibia recibía el sacramento de la Orden Sacerdotal, el primero que impartía el nuevo Arzobispo y días después, el 1ro. de noviembre, decía su primera misa en la Catedral de La Habana.
A partir de ahí construiría una capilla en Párraga, que pondría bajo la advocación de Santa Bárbara, y, ya en los años 50 estaría lista la iglesia, que se inauguraría con la presencia del dictador Fulgencio Batista.
Por Luis Ruiz.
miércoles, 6 de junio de 2012
Mi frase de hoy.
Abrid las puertas de tu cuerpo, dejad que todos los amantes lo habiten.
Por Luis Ruiz.
Por Luis Ruiz.
Herta Müller.
"Las frases verdaderas están siempre relacionadas con la experiencia de una perturbación, con una ofensa de la persona, con una herida profunda. "- HERTA MÜLLER
....La ciudad del puerto tiene la barriga de agua espumosa
el cielo de carne de sandía el camino rural
para el apartadero una garita de señales y ninguna vía paralela
una boca llena de viento una joroba maíz
apretado muy espetado verde
le pregunté por qué precisamente tú
tienes que marcharte con esas gaviotas de tiza y le miré
de lado mientras hacía las maletas..-Herta Muller
Por Luis Ruiz.
....La ciudad del puerto tiene la barriga de agua espumosa
el cielo de carne de sandía el camino rural
para el apartadero una garita de señales y ninguna vía paralela
una boca llena de viento una joroba maíz
apretado muy espetado verde
le pregunté por qué precisamente tú
tienes que marcharte con esas gaviotas de tiza y le miré
de lado mientras hacía las maletas..-Herta Muller
Por Luis Ruiz.
martes, 5 de junio de 2012
lunes, 4 de junio de 2012
El Arcángel.
Cuando el Arcángel se lleva el vaso de cerveza espumosa a los labios parece como si fuerzas procedentes de una constelación distinta confluyeran en su espíritu. El irresistible influjo de la escena no deja de provocar en quien lo observa cierta confusión y deseo. En la acción confluyen encuentros y desencuentros de espíritus que se definen a sí mismos como irresistibles. Y es que el líquido amarillo humedeciendo los labios convoca otras sutancias sulforosas procedentes del cuerpo. El Arcángel es consciente de lo que provoca claro que sí. Y lo disfruta. Tanto que se obstina en entregar el resultado de tanta bebida al depositar toda su orina en la garganta de su contrincante. Asi se ha sellado entre ambos un pacto de amistad que los dos hombres valoran saviamente, y ya nunca más renunciarán a ello.
Por Luis Ruiz.
Por Luis Ruiz.
Un día como hoy del año 1924 falleció Franz Kafka.
Ya había colgado el video aqui, lo hice el año pasado cuando visité su Museo en Praga.
Por Luis Ruiz.
Por Luis Ruiz.
María Antonia - Hilda Oates.
Para mí Maria Antonia es Hilda Oates. Tuve el privilegio de ver la obra y de conocer de cerca a esta excelente actriz. Tuve el privilegio además de ser su amigo. El privilegio añadido de estar en los montajes de obras de Teatro Irrumpe bajo la dirección del maestro Roberto Blanco (toda una clase de actuación y dirección), en las que participaba Hilda Oates. En ese período al que me refiero yo estaba casado con Adriana Quesada, actriz, y parte de ese maravilloso colectivo que fué Teatro Irrumpe. Ver a Hilda en este video me da mucho placer.
Por Luis Ruiz.
Por Luis Ruiz.
domingo, 3 de junio de 2012
Casos y cosas...de domingo.
Domingo. Llueve. Todo gris, muy gris. Leo un libro, enciendo la computadora, chateo con amigos. En la televisión carnaval veneciano en el Támezis en Londres. La plebe admira, aplaude, reverencia a su reina; la vieja vestida de blanco con piedras de Swaroski creo adornando vestido y sombrero. Espectacular y carnavalezco. Apago la tele y me refugio en la biblioteca, entre mis libros y mis sueños. Mañana será otro día.
Por Luis Ruiz.
Por Luis Ruiz.
Nido de Cuervos...
¿Por qué Grecia?
Aqui en EL PAÍS una hermosa y útil visión de Mario Vargas Llosa sobre la situación actual de Grecia.
Por Luis Ruiz.
sábado, 2 de junio de 2012
Frente al espejo.
La mujer se miró en el espejo y descubrió en su rostro tantas arrugas como heridas en su alma. Retrocedió espantada ante su propia imágen.
Por Luis Ruiz.
Por Luis Ruiz.
jueves, 31 de mayo de 2012
A Maria Magdalena.
Este poema me lo envió desde Camaguey para ser publicado en el blog, Adriana Quesada. Maria Magdalena es nuestra amiga Magda, para quien Adriana escribió la obra de teatro "Libelula", de la que ya he hablado aqui en otras ocaciones. El poema lo escribe Adriana a raiz de una historia relacionada con la obra, que acaba de descubrir después de ciertas lecturas. Adriana Quesada es actriz, autora, y directora de teatro. Actualmente reside en Camaguey, Cuba.
A Maria Magdalena
Maria Magdalena de Jesús,
Niña silvestre,
A dónde vas descalza?
A dónde vas sin miedo?
Ve despacio niña,
que prisa tiene la noche
por robar tu secreto.
Espera. Que Dios te proteja por esos caminos desiertos.
Espera. Dime. A dónde vas con ese fuego?
Ay mi alma!
Bien dices tú. Al cielo!.
Por Luis Ruiz.
A Maria Magdalena
Maria Magdalena de Jesús,
Niña silvestre,
A dónde vas descalza?
A dónde vas sin miedo?
Ve despacio niña,
que prisa tiene la noche
por robar tu secreto.
Espera. Que Dios te proteja por esos caminos desiertos.
Espera. Dime. A dónde vas con ese fuego?
Ay mi alma!
Bien dices tú. Al cielo!.
Por Luis Ruiz.
Walt Whitman.
Como Walt Whitman, sentí que los límites de mi mundo no podían ser los de una isla.


Walt Whitman nació un 31 de Mayo de 1819 in West Hills, Long Island, New York.
Leo que Whitman ejerció la carpinteria de construcción, y pienso en mi padre. Mi padre trabajó de carpintero siendo aún muy jóven para mantener a su madre y sus hermanos después que murió su padre. Mi padre no era poeta, claro que no. Ni tan instruido. Sabía lo suficiente. Era inteligente para las cosas prácticas. Y muy honrrado. Llegó a dirigir una Empresa de Construcción y fué muy respetado. Sin embargo nunca entendió mi aficción por las artes, aunque nunca se opuso del todo. Tampóco contribuyó a que desarrollara mi talento. Los padres siempre creen que desean lo mejor para nosotros. Y lo mejor es que hagamos lo que ellos entienden por mejor.
Garcia Lorca escribió sobre Walt Whitman:
Y tu, bello Walt Whitman, duerme a orillas del Hudson con la barba hacia el polo y las manos abiertas.
Arcilla blanda o nieve, tu lengua está llamando
camaradas que velen tu gacela sin cuerpo.
Duerme, no queda nada.
Una danza de muros agita las praderas
y América se anega de máquinas y llanto.
Quiero que el aire fuerte de la noche más honda
quite las flores y letras del arco donde duermes
y un niño negro anuncie a los blancos del oro
la llegada del reino de la espiga.
Walt Whitman escribió en su "Canto a mí mismo":
Realmente, estos son los pensamientos de todo hombre
de cualquier época y lugar; no son originales míos.
Si no son tan tuyos como míos, nada o casi nada son.
Si no son el enigma y la respuesta al eniga, nada son.
Si no son a un tiempo cercanos y remotos, nada son.
Son la hierba que crece donde hay agua y hay tierra,
Son el aire de todos que envuelve el planeta.
Walt Whitman murió un 26 de Marzo de 1892 in Camden, New Jersey.
Por Luis Ruiz.
miércoles, 30 de mayo de 2012
Yo que fui buscando flores, hallé tormentas- grasofismos sobre la flor nacional.
Aqui en el blog de Margarita Garcia Alonso.Yo que fui buscando flores, hallé tormentas- grasofismos sobre la flor nacional.
Por Luis Ruiz.
Por Luis Ruiz.
Murió Daniel Santos, ex bailarín del Ballet de Camaguey.
Acabo de enterarme. Como señalé en un post anterior se encontraba entre la vida y la muerte. Finalmente encontró la paz. Aqui, en una foto que encontré en Google, con el Ballet Municipal de Trujillo, donde se encontraba trabajando hace muchos años.
Amigo, donde quiera que te encuentres, mucha luz.

Por Luis Ruiz.
Amigo, donde quiera que te encuentres, mucha luz.

Por Luis Ruiz.
Mi frase de hoy.
"La vida es como internet. A veces es casi imposible establecer una conexión" / Paulo Coelho.
Por Luis Ruiz.
Por Luis Ruiz.
martes, 29 de mayo de 2012
lunes, 28 de mayo de 2012
Un pensamiento positivo para Daniel Santos.
Frente a mí el café de la mañana, que Ralf ha hecho y me trae hasta aqui. El sol brilla sobre la ciudad y la luz lo invade todo. Es día feriado en Alemania. Más tarde nos reuniremos en casa de una amiga para hacer un grill. Apunto: es una suerte tener a Maria Magdalena cerca, la única amiga de mis años camagueyanos a la que puedo abrazar cuando quiero, y con la que puedo hablar si ella me necesita o si soy yo quien la necesito. Los otros no están, o están desperdigados por el mundo, y no precisamente por sed de aventuras. Y muchos morirán sólos sin nuestra ayuda, y no tendremos la oportunidad de conocer que fué de sus vidas, de sus alegrias y sufrimientos.
Ayer puse un video de mi amigo Daniel Santos, donde evidentemente se le ve bastante desmejorado. Suponía algo fatal. Hace muchos años Daniel se fué a trabajar a Perú, al ballet de Trujillo. Luego mi hermano, que aún vive en Camaguey, me dijo que se comentaba que Daniel tenía problemas. Más nada. Siempre he pensado en él, tenía la esperanza de encontrarlo en Youtube, en Facebook, para saber de él, y conversar aunque fuera virtualmente. No ha podido ser.
Salima, que conoce de nuestra amistad, ayer me envió ese video. Hoy, Salima me confiesa que Daniel se debate en estos momentos entre la vida y la muerte, y que los bailarines que lo conocieron le dedican pensamientos positivos en alguna página que no se cual es. No me lo había querido decir porque sabe cuanto me afecta.Repito, Daniel y yo eramos de esos amigos que sin lugar a dudas se harían viejos juntos, y en la vejez podrían sentarse a conversar, reir y llorar de todo lo que vivieron en el pasado. Pero evidentemente no será asi. Tampóco con los otros amigos que ya no están al alcance de nuestras manos, algunos perdidos para siempre.
Desde aqui mi pensamiento más hermoso, el de un amigo, para Daniel Santos, excelente bailarín, inigualable persona. Un abrazo amigo.
Por Luis Ruiz.
Ayer puse un video de mi amigo Daniel Santos, donde evidentemente se le ve bastante desmejorado. Suponía algo fatal. Hace muchos años Daniel se fué a trabajar a Perú, al ballet de Trujillo. Luego mi hermano, que aún vive en Camaguey, me dijo que se comentaba que Daniel tenía problemas. Más nada. Siempre he pensado en él, tenía la esperanza de encontrarlo en Youtube, en Facebook, para saber de él, y conversar aunque fuera virtualmente. No ha podido ser.
Salima, que conoce de nuestra amistad, ayer me envió ese video. Hoy, Salima me confiesa que Daniel se debate en estos momentos entre la vida y la muerte, y que los bailarines que lo conocieron le dedican pensamientos positivos en alguna página que no se cual es. No me lo había querido decir porque sabe cuanto me afecta.Repito, Daniel y yo eramos de esos amigos que sin lugar a dudas se harían viejos juntos, y en la vejez podrían sentarse a conversar, reir y llorar de todo lo que vivieron en el pasado. Pero evidentemente no será asi. Tampóco con los otros amigos que ya no están al alcance de nuestras manos, algunos perdidos para siempre.
Desde aqui mi pensamiento más hermoso, el de un amigo, para Daniel Santos, excelente bailarín, inigualable persona. Un abrazo amigo.
Por Luis Ruiz.
domingo, 27 de mayo de 2012
Daniel Santos.
Salima acaba de enviarme este video, y me ha dado una gran alegria. Daniel Santos era bailarin del Ballet de Camaguey. El destino, como ha hecho con tantos otros amigos, nos separó. Él se fué a Perú y yo me vine a Alemania. Más nunca supe de él. Daniel y yo eramos inseparables, tanto, que aún cuando yo tenía mi casa, solí quedarme a dormir en su habitación en el albergue de los bailarines. De nuestra amistad, y de nuestras aventuras juntos pudiera escribir miles de páginas. Para mi es un honor postear este video.
Por Luis Ruiz.
Por Luis Ruiz.
Mandinga - Zaleilah - Live - 2012 Eurovision Song Contest.
La representante de Rumanía estuvo acompañada de músicos cubanos, y parte del texto es en español, lo que no me quedó claro si ella también es cubana. Eso si, es hermosa como nuestras mujeres cubanas.Y canta bien.
Por Luis Ruiz.
Por Luis Ruiz.
EUROVISION 2012 Winner - SWEDEN - Loreen - Euphoria
Ayer nos reunimos en casa para ver el Festival de Eurovisión. Tapas, Sekt, cerveza, Cuba libres. Y ganó Loreen, mi favorita.
Por Luis Ruiz.
Por Luis Ruiz.
sábado, 26 de mayo de 2012
"Madrid será la cuna del fascismo"
Esto que leo aqui en Público.es no es una excepción en Europa. Escenas similares se repiten constantemente con la venia de los respectivos gobiernos de cada país.
Por Luis Ruiz.
viernes, 25 de mayo de 2012
Un 25 de Mayo de 1803, nació el poeta Ralph Waldo Emerson.
"El destino del genio es ser un incomprendido: pero no todo incomprendido es un genio"
Ralph Waldo Emerson.
Por Luis Ruiz.
Ralph Waldo Emerson.
Por Luis Ruiz.
jueves, 24 de mayo de 2012
Banderitas en el balcón de mi vecino.
Mi vecino ha encajado en dos de los tiestos de flores, como dardos en el corazón de la tierra, sendas banderitas alemanas, que el viento ondea inefable. Como detesto los símbolos patrios, me parece de un gusto horrendo. De repente ya no veo flores en el balcón de mi vecino, sino dos trozos de telas indecentes que proclaman con mórbida insistencia algo nefasto. Prefiero los otros balcones donde ondean banderas con los colores del arcoiris, porque me parecen más alegres y más inofensivas. Además, eso justifica que a nuestro edificio le llamen "Die Tunten Bunker".
Por Luis Ruiz.
Por Luis Ruiz.
Poema de Norge Espinosa.
(Gracias a Margarita García Alonso)
Margó: „Mira, Luis, que poema mas hermoso encontré por casa de Chely: Ay adónde va a ir así este muchachoque se sienta a llorar entre las niñas que se(confundeadónde podrá ir así tan rubio y azul tan pálidoa contar los pájaros a pedir citas en teléfonos(descompuestossi tiene sólo una mitad de si la otra mitad(pertenece a la madrede quién a quién habrá robado ese gesto(esa veleidadesos párpados amarillos esa voz que alguna vez(fue de las sirenasquiénle va a apagar la luz bajo la cama y le pintará los(senos conque sueñaquién le compondrá las alas a este mal ángel(hecho para las burlassi a sus alas las condenó el viento y gimenquién quién le va a desvestir sobre qué hierba(o pañuelopara abofetearle el, vientre para escupirle(las piernasa este muchacho de cabello crecido así vestido(de novia... (Norge Espinosa)“
Por Luis Ruiz.
Margó: „Mira, Luis, que poema mas hermoso encontré por casa de Chely: Ay adónde va a ir así este muchachoque se sienta a llorar entre las niñas que se(confundeadónde podrá ir así tan rubio y azul tan pálidoa contar los pájaros a pedir citas en teléfonos(descompuestossi tiene sólo una mitad de si la otra mitad(pertenece a la madrede quién a quién habrá robado ese gesto(esa veleidadesos párpados amarillos esa voz que alguna vez(fue de las sirenasquiénle va a apagar la luz bajo la cama y le pintará los(senos conque sueñaquién le compondrá las alas a este mal ángel(hecho para las burlassi a sus alas las condenó el viento y gimenquién quién le va a desvestir sobre qué hierba(o pañuelopara abofetearle el, vientre para escupirle(las piernasa este muchacho de cabello crecido así vestido(de novia... (Norge Espinosa)“
Por Luis Ruiz.
Sigue el buen tiempo.
Se mantienen las temperaturas altas y mucho sol. Leo. Más plantas para el balcón, mi refugio en verano. Salgo en bicicleta. Fotografías y algún video, uno de mis hobbys. Algunas notas al margen sentado en un banco de la ciudad. Noticias de Siguaraya, de mi familia, a través del teléfono mientras pedaleo: Lo mismo con lo mismo.
Por Luis Ruiz.
Por Luis Ruiz.
miércoles, 23 de mayo de 2012
martes, 22 de mayo de 2012
A la memoria de David Lago Gonzélez.
Un dia como hoy nació nuestro amigo y poeta David Lago González. El video ya lo había puesto aqui, se lo hice en Madrid, Junio del 2011. Después de almorzar juntos en un Restaurant de La Chueca, quizo llevarme a ese Café donde según él se tomaba el mejor Espresso de Madrid. Además, quería mostrarme la belleza inaudita de uno de sus camareros. También bebimos un licor que a él le gustaba mucho. Fué la última vez que lo vi.
David, descansa en paz. Un abrazo. Ya volveremos a vernos; Quizás.
Por Luis Ruiz.
David, descansa en paz. Un abrazo. Ya volveremos a vernos; Quizás.
Por Luis Ruiz.
La inmortalidad de David Lago González en su cumpleaños.
Aqui en Di Marga Code: La inmortalidad de David Lago González en su cumpleaños. Un hermoso homenaje de Margarita García Alonso a nuestro común amigo David Lago Gonzáles, que hoy cumpliría años. Que donde quiera que se encuentre reciva nuestro abrazo. Que descanse en paz.
Por Luis Ruiz.
Por Luis Ruiz.
El sutil encanto del flete.
Yo creo que mientras más civilizado y libre es un pueblo, más frio. O es cosa sólo de los alemanes? Yo creo que no. Dicen que en Barcelona, por ejemplo, también es asi. El caso es que, si vas por la calle y alguien te mira y tu le devuelves la mirada, enseguida viran la cara y no te miran más. Lo mismo sucede en el Metro, en cualquier lugar.
En Siguaraya era diferente. Cuando alguien te atraía, lo mirabas a los ojos, y si te correspondía te clavaba la mirada como un dardo en el centro de la ruleta. Desafiante. Y allí no quedaba la cosa. El sutil encanto del flete. El empate era al seguro. A cualquier hora del dia y en cualquier lugar. Y no tenías que ser bello ni muchísimo menos. Te parabas en la puerta de tu casa y sucedía el milagro. Daba gusto. Y bueno, de noche en los parques, parada de guaguas, en una esquina, o por las calles oscuras. El ligue era seguro. Hasta de madrugada. Siempre andaba alguien merodeando en busca del milagro.
Yo, la verdad, que me la pasaba de milagro en milagro. Hasta sin buscarlo. Los milagros caían del cielo, o brotaban de debajo de las piedras, o llegaban de la mano del viento. Aqui no. Es como si la gente tuviera miedo a mirarte de frente o hablar con desconocidos. El milagro ocurre en la oscuridad, entre los arbustos del parque, o en los sótanos oscuros habilitados para esos encuentros. Sólo asi. Anónimos y silenciosos.
Nada, que aqui al milagro no se le escapa ni un gritico de placer.
Por Luis Ruiz.
En Siguaraya era diferente. Cuando alguien te atraía, lo mirabas a los ojos, y si te correspondía te clavaba la mirada como un dardo en el centro de la ruleta. Desafiante. Y allí no quedaba la cosa. El sutil encanto del flete. El empate era al seguro. A cualquier hora del dia y en cualquier lugar. Y no tenías que ser bello ni muchísimo menos. Te parabas en la puerta de tu casa y sucedía el milagro. Daba gusto. Y bueno, de noche en los parques, parada de guaguas, en una esquina, o por las calles oscuras. El ligue era seguro. Hasta de madrugada. Siempre andaba alguien merodeando en busca del milagro.
Yo, la verdad, que me la pasaba de milagro en milagro. Hasta sin buscarlo. Los milagros caían del cielo, o brotaban de debajo de las piedras, o llegaban de la mano del viento. Aqui no. Es como si la gente tuviera miedo a mirarte de frente o hablar con desconocidos. El milagro ocurre en la oscuridad, entre los arbustos del parque, o en los sótanos oscuros habilitados para esos encuentros. Sólo asi. Anónimos y silenciosos.
Nada, que aqui al milagro no se le escapa ni un gritico de placer.
Por Luis Ruiz.
lunes, 21 de mayo de 2012
domingo, 20 de mayo de 2012
La frase de hoy.
"A pesar de la felicidad que tuvimos, no adoro el pasado. Es tan honda la dulzura del presente" / Omar Jayyam.
Por Luis Ruiz.
Por Luis Ruiz.
A media tarde.
En el balcón. Expuesto a la suave brisa. El sol, allá, al otro lado de la calle. Entre geranios, hortenzias, y otras variedades de flores. Como crecieron las plantas en nuestra ausencia. Los pájaros cantan entre las ramas de los árboles. Celebran la inminencia del verano.
Leo "El año del calipso", de Abilio Estévez. Leer a Abilio es siempre un placer. Hasta cuando dice pinga suena bien: "Leche, se llama leche, como la que sale de las tetas de las mujeres, de las vacas, de las chivas, de los manatíes hembras. Se mama una teta jóven y sale leche; se mama una pinga jóven y también sale leche". Sobre todo porque sé muy bien, que esa pinga no es vulgar como el sonido de la palabra al pronunciarla en cubano, sino que Abilio la convierte en algo más preciado y venerado, como debe ser. Tampóco es de esas pingas que algunos cogen con guantes para no ensuciarse al tocarlas. Todo lo contrario.
El cielo es de un azul claro, y sin nubes. Un día de verano. Todo parece tan diáfano.
Por Luis Ruiz.
Leo "El año del calipso", de Abilio Estévez. Leer a Abilio es siempre un placer. Hasta cuando dice pinga suena bien: "Leche, se llama leche, como la que sale de las tetas de las mujeres, de las vacas, de las chivas, de los manatíes hembras. Se mama una teta jóven y sale leche; se mama una pinga jóven y también sale leche". Sobre todo porque sé muy bien, que esa pinga no es vulgar como el sonido de la palabra al pronunciarla en cubano, sino que Abilio la convierte en algo más preciado y venerado, como debe ser. Tampóco es de esas pingas que algunos cogen con guantes para no ensuciarse al tocarlas. Todo lo contrario.
El cielo es de un azul claro, y sin nubes. Un día de verano. Todo parece tan diáfano.
Por Luis Ruiz.
Las últimas palabras de Fuentes.
Aqui en EL PAÍS puede leerse un fragmento de su última novela "Federico en su balcón".
Por Luis Ruiz.
Sobre el Teatro Shanghai en La Habana.
(Gracias a Jorge)
La farándula sigue
No pocos lectores me interceptan en estos días en la calle. Quieren que abunde en esos agujeros negros que se advierten en la crónica habanera y a los que aludí en la página dedicada al teatro Shanghai, el pasado 29 de abril, y al que, más que como un teatro pornográfico —aunque proyectaban allí películas de ese corte— definí como un coliseo de malas palabras y gordas coristas desnudas. Insisten en que escriba sobre clubes y cabarés, restaurantes y hoteles de los años 50.
Dos queridos amigos, el francés Michel Martin, y José Manuel del Río, de España, como imaginándome en aprietos, acudieron, sin que yo se los pidiera, en mi ayuda. Y, cada uno por su vía, me hicieron llegar valiosos materiales. Entre estos una guía de La Habana con el sugestivo título de Para después de la oscuridad, correspondiente a 1956, y otra editada nada menos que por la Marina de Guerra norteamericana, en 1954, para facilitar la estancia en Cuba de sus alistados. Además de artículos publicados entonces sobre el teatro Shanghai y el cabaré Sans Souci y una especie de diccionario biográfico de las vedettes cubanas de la época.
Como 50 años no pasan en vano hay en esos documentos referencias a lugares que ya no son o acerca de los que este escribidor guarda un vago recuerdo. Y de otros, como algunos monumentos que perdieron preeminencia y significación. Las estatuas de Fernando VII —entonces en el centro de la Plaza de Armas— y del presidente Alfredo Zayas —en el espacio que ocupa el Memorial Granma— están entre los monumentos que se recomendaba visitar, y entre las instalaciones de «Deporte y Recreo» no faltaban la Valla Habana, para las lidias de gallos, y los frontones de jai alai.
La lectura de la relación de los hoteles de la época resulta patética; y no menos ocurre con la de los bares y restaurantes, de los que se insertan muy pocos en estas guías en comparación con la cantidad de estos que había entonces en nuestra capital.
Algunos de esos establecimientos —Nacional, Sevilla y Presidente— siguen siendo orgullo de la hotelería cubana, mientras que otros —Florida, Ambos Mundos y Saratoga— viven hoy un esplendor que no conocieron antes. A muchos de los hoteles relacionados en estas guías se los tragó el tiempo. Dejaron de ser lo que eran, como el Royal Palm —San Rafael e Industria— o el Lafayette, en O’Reilly 264. Y de otros ni siquiera quedan los edificios donde se asentaron. Tales son los casos del San Carlos —Egido 507—, San Luis —Belascoaín 73— y Gran Hotel —Teniente Rey 557—. El área que ocupó el hotel Pasaje, en Prado 115, corresponde ahora a la sala Kid Chocolate. Dos buenos hoteles se consignan en estas guías en la calle Industria: Gran América y Regina.
¡Asombro! Para los redactores de la guía de La Habana confeccionada por la Armada de Estados Unidos, son hoteles de playa Areces, Briaritz y Regis, situados todos en el Paseo del Prado, quizá porque desde estos se veía el mar, así como el hotel de apartamentos de 19 y 8, en el Vedado, y, entre otros, el Trotcha, en Calzada y 2, en la misma barriada, lo que confirma que esa instalación fundada en los años 80 del siglo XIX, mantuvo sus funciones hoteleras durante más tiempo del que se suponía. Ya habrá advertido el lector que la publicación de los documentos remitidos por mis serviciales amigos Michel y José Manuel es anterior a la apertura de hoteles como Habana Libre, Riviera, Capri…
Mes amis, Johny Dream
Se abunda en detalles sobre la taberna San Román —San Pedro y Oficio— solo para decir al final que está fuera del circuito turístico. Pasa revista a otros restaurantes de cocina española, como La Tasca —Cárcel y Prado— y El Colmao, en la calle Aramburu 366. Cataloga al bar-restaurante Floridita —Obispo y Monserrate— como «la cuna del daiquirí», destaca la presencia del narrador Ernest Hemingway en el lugar y habla de su daiquirí especial y le celebra su buena cocina, al igual que lo hace con el Monseñor —21 y O—, para decir enseguida que cuenta con uno de los mejores bares de La Habana. Del Sloppy Joe dice que es la meca de los visitantes extranjeros —entiéndase, norteamericanos— y recalca que no son habituales en esa casa, famosa también por sus sándwiches, los cubanos ni los norteamericanos asentados de manera permanente en la ciudad.
También para norteamericanos residentes que quieren huir de los puntos más abiertos al turismo, se recomienda el club Mes Amis, en Séptima y 42, Miramar. Lo contrario del Southland, en San Rafael y Prado, muy propio para visitantes. El Johny Dream, a la orilla del Almendares, es recomendado especialmente por la privacidad que garantiza a las parejas. No queda fuera de las sugerencias, como bar y restaurante, el club Pan American, en la calle Bernaza 1. Este fue el primer establecimiento de su tipo en La Habana que contó con la maravilla del aire acondicionado, y estuvo a punto, en su momento, de arrebatarle la clientela al Floridita. La guía exalta su excelente coctelería y sus platos a base de carnes blancas y rojas. Frascati —Prado 357— se especializaba en cocina italiana.
El Shanghai se halla entre los teatros que se promocionan en Para después de la oscuridad, no en la de la Marina de Guerra. Señala que no se trata de un teatro chino aunque esté radicado en el Barrio Chino habanero. Las obras que allí suben a escena, se dice, son difíciles de entender para quien no domine el español, pero los bailes que se presentan entre un acto y otro y las películas pornográficas que se exhiben son fáciles en cualquier idioma. Añade —¡vaya promoción!— que se trata de una sala «estrecha y mal ventilada», pero que no puede pedirse más por lo que se paga en la taquilla. Precisa: «Este teatro es probablemente uno de los pocos lugares en el mundo que muestra abiertamente películas pornográficas».
Hay que decir que eso no es del todo cierto. Ese era el fuerte de la programación del cine Pacífico, en la calle Zanja, entre otras salas cinematográficas. En la misma guía se alude al club Colonial —Oficios 164, frente al convento de San Francisco— con sus programas «a menudo subiditos de tono para complacer al turismo», llevados a la pista generalmente por travestis, según refiere Leonardo Acosta en el tomo I de su Descarga cubana. Y el Paleta Club —Carretera Central, sin más precisiones en el documento— con habitaciones para «funciones» privadas y películas para despedidas de soltero; una programación que, se lee en Para después de la oscuridad, mantiene al establecimiento en la mira de las autoridades, que casi siempre se la dejan pasar, pero que en ocasiones lo clausuran.
Caluroso, incómodo, maloliente
La policía mira para otro lado mientras José Orozco García, empresario del Shanghai ofrece el espectáculo de seis muchachas completamente desnudas y exhibe películas «de relajo», dice el periodista Richard Skylar en un artículo de 1957 sobre ese teatro. Si preguntas a un funcionario cubano, se encogerá de hombros. Te dirá que el Shanghai no existe porque no se anuncia. Los cubanos habituales se pasan de boca a boca informes sobre la programación y a los estadounidenses de paso por la Isla les basta para llegar al coliseo una corta caminata desde el centro comercial de la ciudad. Los que saben cómo es la cosa llegan temprano para alcanzar buenos asientos. El lleno de la platea es total y ni siquiera ofreciendo diez pesos a los revendedores, que es lo que se les paga en el teatro América en noches de gran gala, se consigue un buen asiento, y debe el espectador conformarse con una butaca del centro en la quinta o sexta fila.
Cuando apenas hay aire en la sala y el calor se hace insoportable, se alza el telón. El profesionalismo que les falta, lo suplen los actores con la pasión con que asumen la apuesta. Poco entienden los espectadores extranjeros de lo que se dice, pero caricias y gestos no necesitan de traductores. Concluye el primer acto y baja el telón. Seis muchachas aparecen en el escenario. No interpretan precisamente una coreografía. Actúan en solitario, sin coordinación alguna, pero la ropa va desapareciendo y las muchachas giran, saltan, corren; parecen querer lanzarse hacia el lunetario. Es lo mismo que el público ha visto durante años, sin variación alguna. Cae otra vez el telón y, sin que el espectador se reponga, vuelve a levantarse la cortina. Es el segundo acto de la obra que abrió la noche. Ya nadie recuerda qué pasó antes, pero no importa. Vuelven las malas palabras, las insinuaciones, el acto sexual que se simula y que nunca se escenifica. La pieza de resistencia, por llamarle de alguna manera, está aún por venir. Es la película pornográfica.
Hay dos funciones todas las noches y matinés los domingos en ese teatro caluroso, maloliente e incómodo de 750 capacidades. Siempre las funciones se estructuran de la misma manera: la obra de teatro, la revista musical y la película.
Hay en estas páginas un vistazo amplio a los cabarés habaneros de los 50. Del Panchín y el Pensilvania, clubes de segunda categoría en la Playa de Marianao, frente al Coney Island, se dice que profesores de baile norteamericanos los visitan para enterarse de cómo se bailaban de verdad los ritmos cubanos.
Bajo el rubro de «Los magníficos», se pasa balance en Para después de la oscuridad, a establecimientos como Tropicana y Parisién, en el hotel Nacional, el más nuevo de los clubes nocturnos de La Habana de entonces, inaugurado en enero de 1956. También al Sans Souci, en la carretera de Arroyo Arenas, y al Montmartre, en 23 y P, la única sala de fiestas importante que era entonces completamente bajo techo.
Del Montmartre dice también que es cara y la favorita de los cubanos; contaba con un casino de juego que abría todos los días desde las cuatro de la tarde. Hay casinos asimismo en Tropicana y en el Parisién. Sans Souci, además del casino, con ruleta, dados y otros juegos de azar, incluía un bingo con premios de hasta 1 500 pesos.
Sans Souci nació después de finalizada la I Guerra Mundial en una villa de estilo español. Hacia 1956 fue objeto de una gran inversión que permitió renovarlo totalmente. En diciembre de ese año presentó en su pista a la gran cantante francesa Edith Piaf, «el Gorrión de París», y por esa misma época ofreció 350 000 dólares al boxeador Rocky Marciano, campeón mundial de los pesos pesados, para que se enfrentara al Niño Valdés, su retador cubano, encuentro que Marciano, que se retiraría invicto para morir poco después en un accidente de aviación, no aceptó. Por cierto, el campeón era fanático de las comidas del Frascati durante sus estancias en La Habana.
Fue en el Sans Souci que empezó en Cuba un juego de azar conocido como Razzle Dazzle, que se jugaba con ocho dados y un tablero y que ofrecía al jugador una posibilidad de triunfo de uno entre mil, aunque los croupiers se empeñaban en hacer creer a los ingenuos exactamente lo contrario. La gente perdía el dinero por miles y luego venía el llanto y el crujir de dientes. Una figura de la política norteamericana perdió en ese juego varios miles de dólares en una sola sentada en el Sans Souci. Bicho que era el sujeto, pagó con un cheque sin fondos. Hubo un gran escándalo cuando se descubrió la triquiñuela. No por el juego, sino por el cheque. Sobre esto hablaremos en otro momento. Anticipemos solamente que el Gobierno cubano suspendió el Razzle Dazzle en el Sans Souci y en todos los casinos de la Isla y expulsó a 11 de sus jugadores.
Por Luis Ruiz.
La farándula sigue
No pocos lectores me interceptan en estos días en la calle. Quieren que abunde en esos agujeros negros que se advierten en la crónica habanera y a los que aludí en la página dedicada al teatro Shanghai, el pasado 29 de abril, y al que, más que como un teatro pornográfico —aunque proyectaban allí películas de ese corte— definí como un coliseo de malas palabras y gordas coristas desnudas. Insisten en que escriba sobre clubes y cabarés, restaurantes y hoteles de los años 50.
Dos queridos amigos, el francés Michel Martin, y José Manuel del Río, de España, como imaginándome en aprietos, acudieron, sin que yo se los pidiera, en mi ayuda. Y, cada uno por su vía, me hicieron llegar valiosos materiales. Entre estos una guía de La Habana con el sugestivo título de Para después de la oscuridad, correspondiente a 1956, y otra editada nada menos que por la Marina de Guerra norteamericana, en 1954, para facilitar la estancia en Cuba de sus alistados. Además de artículos publicados entonces sobre el teatro Shanghai y el cabaré Sans Souci y una especie de diccionario biográfico de las vedettes cubanas de la época.
Como 50 años no pasan en vano hay en esos documentos referencias a lugares que ya no son o acerca de los que este escribidor guarda un vago recuerdo. Y de otros, como algunos monumentos que perdieron preeminencia y significación. Las estatuas de Fernando VII —entonces en el centro de la Plaza de Armas— y del presidente Alfredo Zayas —en el espacio que ocupa el Memorial Granma— están entre los monumentos que se recomendaba visitar, y entre las instalaciones de «Deporte y Recreo» no faltaban la Valla Habana, para las lidias de gallos, y los frontones de jai alai.
La lectura de la relación de los hoteles de la época resulta patética; y no menos ocurre con la de los bares y restaurantes, de los que se insertan muy pocos en estas guías en comparación con la cantidad de estos que había entonces en nuestra capital.
Algunos de esos establecimientos —Nacional, Sevilla y Presidente— siguen siendo orgullo de la hotelería cubana, mientras que otros —Florida, Ambos Mundos y Saratoga— viven hoy un esplendor que no conocieron antes. A muchos de los hoteles relacionados en estas guías se los tragó el tiempo. Dejaron de ser lo que eran, como el Royal Palm —San Rafael e Industria— o el Lafayette, en O’Reilly 264. Y de otros ni siquiera quedan los edificios donde se asentaron. Tales son los casos del San Carlos —Egido 507—, San Luis —Belascoaín 73— y Gran Hotel —Teniente Rey 557—. El área que ocupó el hotel Pasaje, en Prado 115, corresponde ahora a la sala Kid Chocolate. Dos buenos hoteles se consignan en estas guías en la calle Industria: Gran América y Regina.
¡Asombro! Para los redactores de la guía de La Habana confeccionada por la Armada de Estados Unidos, son hoteles de playa Areces, Briaritz y Regis, situados todos en el Paseo del Prado, quizá porque desde estos se veía el mar, así como el hotel de apartamentos de 19 y 8, en el Vedado, y, entre otros, el Trotcha, en Calzada y 2, en la misma barriada, lo que confirma que esa instalación fundada en los años 80 del siglo XIX, mantuvo sus funciones hoteleras durante más tiempo del que se suponía. Ya habrá advertido el lector que la publicación de los documentos remitidos por mis serviciales amigos Michel y José Manuel es anterior a la apertura de hoteles como Habana Libre, Riviera, Capri…
Mes amis, Johny Dream
Se abunda en detalles sobre la taberna San Román —San Pedro y Oficio— solo para decir al final que está fuera del circuito turístico. Pasa revista a otros restaurantes de cocina española, como La Tasca —Cárcel y Prado— y El Colmao, en la calle Aramburu 366. Cataloga al bar-restaurante Floridita —Obispo y Monserrate— como «la cuna del daiquirí», destaca la presencia del narrador Ernest Hemingway en el lugar y habla de su daiquirí especial y le celebra su buena cocina, al igual que lo hace con el Monseñor —21 y O—, para decir enseguida que cuenta con uno de los mejores bares de La Habana. Del Sloppy Joe dice que es la meca de los visitantes extranjeros —entiéndase, norteamericanos— y recalca que no son habituales en esa casa, famosa también por sus sándwiches, los cubanos ni los norteamericanos asentados de manera permanente en la ciudad.
También para norteamericanos residentes que quieren huir de los puntos más abiertos al turismo, se recomienda el club Mes Amis, en Séptima y 42, Miramar. Lo contrario del Southland, en San Rafael y Prado, muy propio para visitantes. El Johny Dream, a la orilla del Almendares, es recomendado especialmente por la privacidad que garantiza a las parejas. No queda fuera de las sugerencias, como bar y restaurante, el club Pan American, en la calle Bernaza 1. Este fue el primer establecimiento de su tipo en La Habana que contó con la maravilla del aire acondicionado, y estuvo a punto, en su momento, de arrebatarle la clientela al Floridita. La guía exalta su excelente coctelería y sus platos a base de carnes blancas y rojas. Frascati —Prado 357— se especializaba en cocina italiana.
El Shanghai se halla entre los teatros que se promocionan en Para después de la oscuridad, no en la de la Marina de Guerra. Señala que no se trata de un teatro chino aunque esté radicado en el Barrio Chino habanero. Las obras que allí suben a escena, se dice, son difíciles de entender para quien no domine el español, pero los bailes que se presentan entre un acto y otro y las películas pornográficas que se exhiben son fáciles en cualquier idioma. Añade —¡vaya promoción!— que se trata de una sala «estrecha y mal ventilada», pero que no puede pedirse más por lo que se paga en la taquilla. Precisa: «Este teatro es probablemente uno de los pocos lugares en el mundo que muestra abiertamente películas pornográficas».
Hay que decir que eso no es del todo cierto. Ese era el fuerte de la programación del cine Pacífico, en la calle Zanja, entre otras salas cinematográficas. En la misma guía se alude al club Colonial —Oficios 164, frente al convento de San Francisco— con sus programas «a menudo subiditos de tono para complacer al turismo», llevados a la pista generalmente por travestis, según refiere Leonardo Acosta en el tomo I de su Descarga cubana. Y el Paleta Club —Carretera Central, sin más precisiones en el documento— con habitaciones para «funciones» privadas y películas para despedidas de soltero; una programación que, se lee en Para después de la oscuridad, mantiene al establecimiento en la mira de las autoridades, que casi siempre se la dejan pasar, pero que en ocasiones lo clausuran.
Caluroso, incómodo, maloliente
La policía mira para otro lado mientras José Orozco García, empresario del Shanghai ofrece el espectáculo de seis muchachas completamente desnudas y exhibe películas «de relajo», dice el periodista Richard Skylar en un artículo de 1957 sobre ese teatro. Si preguntas a un funcionario cubano, se encogerá de hombros. Te dirá que el Shanghai no existe porque no se anuncia. Los cubanos habituales se pasan de boca a boca informes sobre la programación y a los estadounidenses de paso por la Isla les basta para llegar al coliseo una corta caminata desde el centro comercial de la ciudad. Los que saben cómo es la cosa llegan temprano para alcanzar buenos asientos. El lleno de la platea es total y ni siquiera ofreciendo diez pesos a los revendedores, que es lo que se les paga en el teatro América en noches de gran gala, se consigue un buen asiento, y debe el espectador conformarse con una butaca del centro en la quinta o sexta fila.
Cuando apenas hay aire en la sala y el calor se hace insoportable, se alza el telón. El profesionalismo que les falta, lo suplen los actores con la pasión con que asumen la apuesta. Poco entienden los espectadores extranjeros de lo que se dice, pero caricias y gestos no necesitan de traductores. Concluye el primer acto y baja el telón. Seis muchachas aparecen en el escenario. No interpretan precisamente una coreografía. Actúan en solitario, sin coordinación alguna, pero la ropa va desapareciendo y las muchachas giran, saltan, corren; parecen querer lanzarse hacia el lunetario. Es lo mismo que el público ha visto durante años, sin variación alguna. Cae otra vez el telón y, sin que el espectador se reponga, vuelve a levantarse la cortina. Es el segundo acto de la obra que abrió la noche. Ya nadie recuerda qué pasó antes, pero no importa. Vuelven las malas palabras, las insinuaciones, el acto sexual que se simula y que nunca se escenifica. La pieza de resistencia, por llamarle de alguna manera, está aún por venir. Es la película pornográfica.
Hay dos funciones todas las noches y matinés los domingos en ese teatro caluroso, maloliente e incómodo de 750 capacidades. Siempre las funciones se estructuran de la misma manera: la obra de teatro, la revista musical y la película.
Hay en estas páginas un vistazo amplio a los cabarés habaneros de los 50. Del Panchín y el Pensilvania, clubes de segunda categoría en la Playa de Marianao, frente al Coney Island, se dice que profesores de baile norteamericanos los visitan para enterarse de cómo se bailaban de verdad los ritmos cubanos.
Bajo el rubro de «Los magníficos», se pasa balance en Para después de la oscuridad, a establecimientos como Tropicana y Parisién, en el hotel Nacional, el más nuevo de los clubes nocturnos de La Habana de entonces, inaugurado en enero de 1956. También al Sans Souci, en la carretera de Arroyo Arenas, y al Montmartre, en 23 y P, la única sala de fiestas importante que era entonces completamente bajo techo.
Del Montmartre dice también que es cara y la favorita de los cubanos; contaba con un casino de juego que abría todos los días desde las cuatro de la tarde. Hay casinos asimismo en Tropicana y en el Parisién. Sans Souci, además del casino, con ruleta, dados y otros juegos de azar, incluía un bingo con premios de hasta 1 500 pesos.
Sans Souci nació después de finalizada la I Guerra Mundial en una villa de estilo español. Hacia 1956 fue objeto de una gran inversión que permitió renovarlo totalmente. En diciembre de ese año presentó en su pista a la gran cantante francesa Edith Piaf, «el Gorrión de París», y por esa misma época ofreció 350 000 dólares al boxeador Rocky Marciano, campeón mundial de los pesos pesados, para que se enfrentara al Niño Valdés, su retador cubano, encuentro que Marciano, que se retiraría invicto para morir poco después en un accidente de aviación, no aceptó. Por cierto, el campeón era fanático de las comidas del Frascati durante sus estancias en La Habana.
Fue en el Sans Souci que empezó en Cuba un juego de azar conocido como Razzle Dazzle, que se jugaba con ocho dados y un tablero y que ofrecía al jugador una posibilidad de triunfo de uno entre mil, aunque los croupiers se empeñaban en hacer creer a los ingenuos exactamente lo contrario. La gente perdía el dinero por miles y luego venía el llanto y el crujir de dientes. Una figura de la política norteamericana perdió en ese juego varios miles de dólares en una sola sentada en el Sans Souci. Bicho que era el sujeto, pagó con un cheque sin fondos. Hubo un gran escándalo cuando se descubrió la triquiñuela. No por el juego, sino por el cheque. Sobre esto hablaremos en otro momento. Anticipemos solamente que el Gobierno cubano suspendió el Razzle Dazzle en el Sans Souci y en todos los casinos de la Isla y expulsó a 11 de sus jugadores.
Por Luis Ruiz.
sábado, 19 de mayo de 2012
Pelirrojo y Colorina en La Laguna.
Bog Teatro del Eclipse: Pelirrojo y Colorina en La Laguna, de la actriz cubana residente en Tenerife, Marianexys Llanes.
Por Luis Ruiz.
Por Luis Ruiz.
viernes, 18 de mayo de 2012
El mar, siempre el mar. La Barceloneta.
jueves, 17 de mayo de 2012
Casos y cosas...desde Barcelona.
Mi amigo Domingo decidió venirse a vivir a Barcelona. Fué su sueno de siempre. Desde tiempos inmemoriales venía todos los anos. Decía: Cuando me retire me iré a vivir a Barcelona. Y asi fué.
Con su retiro, en Alemania pudiera vivir muy bien. Pero el clima, el idioma, la ciudad, y algunos amigos, le alentaron a tomar tal desición. Llevaba viviendo en Berlin más de cuarenta anos.
Pero Espana ya no es la misma. Barcelona es más cara que Berlin. Y más primitiva. Aparte de las leyes y funciones estatales que responden más bien a un sistema "Kafkiano" incomprensible y absurdo.
Aún asi, dice que no le pesa. Pero dudo que su vejez transcurra con la paz que se merece. Aún asi le deseo lo mejor. Y espero que no tenga que arrepentirse.
Por Luis Ruiz.
Con su retiro, en Alemania pudiera vivir muy bien. Pero el clima, el idioma, la ciudad, y algunos amigos, le alentaron a tomar tal desición. Llevaba viviendo en Berlin más de cuarenta anos.
Pero Espana ya no es la misma. Barcelona es más cara que Berlin. Y más primitiva. Aparte de las leyes y funciones estatales que responden más bien a un sistema "Kafkiano" incomprensible y absurdo.
Aún asi, dice que no le pesa. Pero dudo que su vejez transcurra con la paz que se merece. Aún asi le deseo lo mejor. Y espero que no tenga que arrepentirse.
Por Luis Ruiz.
miércoles, 16 de mayo de 2012
Con un libro sobre Lorca entre mis manos.
Lorca dijo de los cubanos: "Esta gente es exagerada como pocas". Le bastó escuchar un par de comentarios sobre su persona para sacar tal conclusión. Pero con ello definía una característica del cubano con respecto a todos los asuntos, existenciales y de todo tipo.
(Pero Habana es una maravilla, tanto la vieja como la moderna. Es una mezcal de Málaga y Cádiz, pero mucho más animada y relajada por el trópico. El ritmo de la ciudad es acariciador, suave, sensualísimo, y lleno de un encanto que es absolutamente espanol, mejor dicho, andaluz. Habana es fundamentalmnete espanola, pero de lo más característico y más profundo de nuestra civilización. Yo naturalmente me encuentro como en mi casa. Ya vosotros sabeis lo que a mí me gusta Málaga, y esto es mucho más rico y variado.)
Por Luis Ruiz.
(Pero Habana es una maravilla, tanto la vieja como la moderna. Es una mezcal de Málaga y Cádiz, pero mucho más animada y relajada por el trópico. El ritmo de la ciudad es acariciador, suave, sensualísimo, y lleno de un encanto que es absolutamente espanol, mejor dicho, andaluz. Habana es fundamentalmnete espanola, pero de lo más característico y más profundo de nuestra civilización. Yo naturalmente me encuentro como en mi casa. Ya vosotros sabeis lo que a mí me gusta Málaga, y esto es mucho más rico y variado.)
Por Luis Ruiz.
Casos y cosas...
Desayunamos a media manana. Caminata por los alrrededores. Compra de libros en una librería de libros baratos. Almuerzo con Ralf y Doris en un Restaurant de Paseo de Gracia. En Café Schilling. Barrio Gótico. El pulso de la vida. Un rostro bello que se insinúa pero no se da. Esos ojos azules que si me pertenecen.
Doris tiene razón; ningún tiempo pasado fué mejor. Vivir el momento. Este presente hermoso que nos pertenece y que debemos vivir.
Por Luis Ruiz.
Doris tiene razón; ningún tiempo pasado fué mejor. Vivir el momento. Este presente hermoso que nos pertenece y que debemos vivir.
Por Luis Ruiz.
martes, 15 de mayo de 2012
Casos y cosas...
En la FNAC compro la última novela de Abilio Estévez que tanto deseaba tener ya entre mis manos. Y unos Cuentos imprescindibles de Anton Chejov. En Plaza de Cataluna grupos de jóvenes, consignas, carteles, y casas de campana donde acampan los indignados. Y muchos polícias. En el Portal del Angel algunas compritas. Dejamos atrás la Catedral, nos internamos en una de sus pequenas calles, y entramosa a saludar a un conocido nuestro que nos cuenta que apenas si puede sobrevivir con las ganancias del negocio. En Café Jardín, visita inevitable cuando visitamos la ciudad comemos tapas y bebemos una jarra de cerveza. Y cómo no acercarse al mar? Allí permanecemos un largo tiempo, casi al final, donde se reunen los gay. Y cuantos cuerpos para observar y deleitarse en las formas, y el contenido, pués muchos están desnudos, expuestos al sol, divinos como estatuas de marmol griegas. Sin apenas darnos cuenta cae la noche. Cenamos y regresamos a casa.
Por Luis Ruiz.
Por Luis Ruiz.
lunes, 14 de mayo de 2012
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